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25N: No más violencia machista

 

El pasado 25N el colegio Montserrat volvió a teñirse de violeta. Este color es ya símbolo de la lucha feminista contra la violencia machista, y cada año nos recuerda que aún no está todo el camino andado, por mucho que hayamos avanzado como sociedad.

                                            

Este año especial, marcado por la pandemia del coronavirus, los pasillos de nuestro colegio se han inundado de mariposas violetas creadas por los niños y niñas de la etapa de infantil, para que ninguna persona olvide qué estamos celebrando este Día Internacional contra la Violencia Machista.

Desde el grupo ecosocial así como desde el grupo feminista del colegio, las propuestas se han sumado para contribuir en la formación de un alumnado con espíritu crítico, capaz de detectar micromachismos y situaciones de maltrato y desigualdad.

El grupo feminista además, redactó un manifiesto para reincidir en las escalofriantes cifras de mujeres maltratadas y asesinadas desde que existen datos, así como reflexionar en la necesidad de seguir trabajando en la prevención de la violencia machista desde las aulas.

Prácticamente todo el alumnado del colegio, tanto en la etapa de Primaria como en Secundaria y Bachillerato, ha contado con un “Diario de Observación” en el que han ido anotando, durante una semana, todas aquellas situaciones en las que se pudiera estar dando algún tipo de desigualdad o maltrato a la mujer.

El debate posterior ha recogido los comentarios que en ocasiones pasan desapercibidos como “está llorando como una niña” o el tratamiento estereotipado de los juguetes para los niños y niñas. El espacio ha servido también como altavoz para las chicas, que han compartido experiencias y miedos que les toca vivir por el hecho de ser mujer. Las situaciones más graves de la violencia machista -aquellas en las que las mujeres están sometidas a una violencia verbal, psicológica e incluso física- se han agravado con la pandemia y el confinamiento. Por ello, se ha creado un espacio para la reflexión  sobre este hecho.

Esperamos que esta lucha por la erradicación de la violencia machista tenga sus días contados porque ya no sea necesaria. Mientras tanto, seguiremos haciéndola visible.